Los británicos parecen haber dado carpetazo definitivo al debate del Brexit. Ya no es la salida de la UE lo que les preocupa. Megxit es el nombre que han dado al nuevo gran debate nacional: el distanciamiento del príncipe Harry y Meghan Markle de la familia Real.
Los duques de Sussex soltaron la bomba hace unos días en su cuenta oficial de Instagram. En el mensaje decían que llevaban tiempo discutiéndolo. Y que finalmente habían decidido separarse de la familia Real y tratar de ser «financieramente independientes».
El plan de Harry y Meghan de trasladarse a vivir fuera de Reino Unido parece que ya está en marcha. Porque Meghan Markle apenas ha pasado unos días en Londres antes de volver a coger un avión para Canadá, donde la pareja dejó a su hijo. La noticia de su vuelo no ha hecho más que endurecer las críticas hacia ella.
Y es que casi toda la prensa la culpa de lo que consideran una decisión egoísta de la pareja, y ahora también de marcharse y dejar solo a su marido lidiando con la enorme crisis que se ha desatado.
Si bien el palacio de Buckingham aún no ha hecho ningún comunicado al respecto, toda la prensa asegura que el personal al completo, la familia Real y sobre todo la reina Isabel, están «heridos y furiosos». Y es que al parecer, su nieto no le habría dicho nada a la monarca, que se enteró de la decisión de la pareja… por televisión.
Lo que sí parece es que no hay marcha atrás para el Megxit. Porque las figuras de Meghan y Harry del famoso museo Madame Tussaud han sido retiradas. Ahora, la familia Real está formada solo por la reina, el duque de Edimburgo y el príncipe Guillermo y Kate Middleton. Ni rastro de los duques de Sussex.
No solo los tabloides y la prensa sensacionalista hablan del Megxit sin cesar. También periódicos serios como The Times o The Guardian llevan un montón de noticias y columnas al respecto.
The Guardian asegura que los duques de Sussex llevaban tiempo preparando el terreno para huir de Reino Unido. Y critican que sea en realidad una salida a medias de la familia Real. Se trata, según muchos analistas, de una salida a medias. De un abandono de sus obligaciones como royals, pero la pareja pretende seguir disfrutando de algunos beneficios.
Por eso hace ya meses se ocuparon de que todo el merchandising con sus imágenes (tazas, platos, fundas de móvil, bolígrafos etc), lo sigan facturando ellos, y no los Windsor. Curiosa forma de ser independientes económicamente, piensan muchos en Reino Unido.
